- Proyecto de ley busca eliminar los logos y la publicidad creada cada cuatro años por los gobiernos de turno.
- La propuesta incluye que presidentes, alcaldes y gobernadores tengan una sola identidad.
Los Representantes a la Cámara del Partido Alianza Verde, Carolina Giraldo Botero y Cristian Avendaño, radicaron el proyecto de ley que busca eliminar las marcas de Gobierno, con el objetivo de ahorrarle al país un poco más de 2 billones de pesos anuales.
La iniciativa busca eliminar los logos y la publicidad creada cada cuatro años por el gobierno de turno, por considerar que esto es un gasto innecesario que le cuesta miles de millones de pesos al país.
Por el contrario, los parlamentarios proponen que haya un único manual de identidad visual para todas las entidades estatales (Presidencia, alcaldía, gobernaciones, ministerios, Fuerzas Militares, Senado, Cámara, Cortes, Fiscalía, Procuraduría, entre otras). Es decir, que con la llegada de un nuevo Presidente de la República, Alcalde o Gobernador, el país no se vea obligado a invertir millonarias sumas en cambio de papelería, logos y distinciones propias.
"Con este proyecto queremos acabar el derroche de recursos públicos por parte de los alcaldes, gobernadores, presidentes y directores administrativos de turno, que usan la plata del Estado para alimentar su vanidad mediante la imagen de las instituciones o para conseguir seguidores y mejorar su imagen personal como políticos. Ya basta de cambiarle la identidad visual a las entidades al antojo y capricho de una persona. Se debe respetar la neutralidad política, religiosa e institucional de todas las entidades”, indicó el Representante por Santander, Cristian Avendaño.
“Este proyecto es muy importante, pues en un Gobierno de cambio, que busca austeridad, no podemos seguir incurriendo en gastos innecesarios para crear marcas personalizadas, según el gobierno de turno, cuando el Estado es uno solo. Este dinero podría tener un mejor uso”, señaló la Representante por Risaralda, Carolina Giraldo Botero.
El proyecto de ley fue radicado en Comisión Sexta de la Cámara de Representantes.
