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Colombia y sus barcos de la muerte: crueles e innecesarios

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  • Cada año Colombia exporta unos 250.000 animales vivos por mar, en condiciones infernales

  • Aprox. el 0.3 % de los animales muere en cada trayecto. En un viaje de 20.000, morirán 60

  • Los países a los que Colombia exporta animales vivos, también importan carne congelada.
El martes 30 de agosto, desde las 9:00 a.m., en el salón Boyacá del Congreso, se adelantará la primera audiencia pública en el país sobre el negocio de la exportación marítima de animales vivos. Esta audiencia está motivada por el proyecto de ley 103 de 2022, de autoría de la senadora Andrea Padilla, que propone la prohibición progresiva (a cinco años) de esta actividad.
 
“La motivación de nuestro proyecto es eliminar la extrema crueldad a la que son sometidos los miles de animales (entre 8.000 y 20.000) que son exportados vivos por mar, a países de oriente medio. Estos animales viajan hacinados, en condiciones extremas de temperatura, encerrados en los mismos lugares donde comen, orinan y defecan, sin ventilación y sin atención veterinaria.
 
Tanto así, que según el ICA muere aproximadamente el 0.3 de cada cargamento. Pero este negocio no solo es cruel, sino innecesario, pues Colombia también exporta carne congelada y refrigerada a los mismos países a los que exporta animales vivos: Líbano, Egipto, Jordania y Arabia Saudita”, explicó la senadora Padilla.
 
Además, según Padilla, el ICA ha sido negligente en su deber de garantizar el bienestar de los animales. “El ICA dice que su deber llega hasta el puerto en Colombia, por lo que no aporta material audiovisual sobre el estado de los animales durante el trayecto ni cuando arriban al país importador, no garantiza sino un veterinario por viaje, así vayan 20 mil animales, y mucho menos envía técnicos o cuenta con cámaras en las embarcaciones, que suelen ser barcos viejos y deteriorados”. En efecto, los videos que aporta el ICA son tan solo del momento del embarque, donde, según la senadora “no está el pecado del negocio”.
 
Sobre las supuestas afectaciones económicas que acarrearía la prohibición progresiva de la actividad, la senadora niega que se verían perjudicadas 350.000 familias de pequeños ganaderos, como ha dicho Lafaurie, presidente de Fedegán. Según ella, “la cifra es falsa porque actualmente solo hay 53 predios certificados como exportadores y estos están concentrados en 5 departamentos; es decir que, para que 350 mil familias se vieran afectadas, sería necesario que 6 mil familias fueran las propietarias de los predios certificados, lo que es irreal. Incluso si se exportara un animal por familia no se alcanzaría el total de 350 mil familias afectadas, dado que actualmente se exportan unos 270.000 animales”.
 
Finalmente, la senadora hizo hincapié en la necesidad de “poner las cifras reales sobre la mesa”, pues, según señaló, “el Ministerio de Agricultura y el mismo Fedegán nos han dicho no tenerla”. Pese a ella, precisó que su lucha no es contra la exportación de carne congelada o de productos cárnicos procesados, sino contra la exportación de los animales vivos”. Según el DANE, mientras la primera actividad representa tan solo el 0.054 del PIB del país, la segunda es el 0.74.
 
Cabe señalar que, en 2012, el presidente de Fedegán rechazaba esta actividad argumentando que “son muchos los empleos que se dejan de generar cuando se exporta ganado en pie''.

 
Jefe de prensa: Francisco Trejos: 3017774724


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