Ya se cumplen tres años desde que miles de colombianos depositaron su confianza en mí y me otorgaron el privilegio de representarlos en el Senado de la República, debo confesar que poder hacerlo siempre fue un sueño para mí.
Hace varios meses he venido sufriendo una serie de quebrantos de salud que hoy me obligan a tomar una decisión que me entristece. Luego de mucho pensarlo y sin desconocer todos los días de tantos esfuerzos, de arduo trabajo con un gran equipo que me acompañó, hoy anuncio ante la opinión pública la renuncia irrevocable a mi curul en el Congreso de la República.
Puedo decir con orgullo que aprovechamos el tiempo: con todos los argumentos legales logramos que el Río Cauca fuera declarado sujeto de derechos, con investigación en mano y activismo continuo detuvimos la venta de ISA y la defendimos como empresa pública y rentable, con rigurosidad lideré los debates de control político de salud en el Senado donde poco se aborda el tema y también sacamos adelante el paquete de salud mental y medidas saludables del que recientemente celebramos la aprobación de la ley de comida chatarra.
Puedo decir con orgullo que aprovechamos el tiempo: con todos los argumentos legales logramos que el Río Cauca fuera declarado sujeto de derechos, con investigación en mano y activismo continuo detuvimos la venta de ISA y la defendimos como empresa pública y rentable, con rigurosidad lideré los debates de control político de salud en el Senado donde poco se aborda el tema y también sacamos adelante el paquete de salud mental y medidas saludables del que recientemente celebramos la aprobación de la ley de comida chatarra.
Sin duda estar en el Congreso ha sido una oportunidad invaluable en la que junto con mi equipo aprovechamos para trabajar por la mejora de la calidad de vida de la ciudadanía colombiana. La salud pública nunca ha sido una prioridad del legislativo y es un gran motivo de alegría ver que quedó una ruta trazada. La salud volvió a la agenda del Congreso.
Con mucho pesar asumo que mi actual condición de salud no me permite asumir el último año como Senador en las condiciones que lo amerita y aunque la virtualidad facilita mucho el proceder del legislativo, no es ético de mi parte continuar recibiendo un salario y mantener un compromiso que sé que no podré corresponder, por tales motivos prefiero dar un paso al costado.
Agradezco infinitamente el apoyo del Partido Alianza Verde, la confianza de cada uno de los ciudadanos que creyó en mí y sobre todo la incondicionalidad de mi familia quienes han sacrificado tanto como yo. A mamá y a papá siempre gracias por todo su cariño y su consejo al igual que el apoyo de mis hermanos.
Ahora que recobrar mi salud será la prioridad, espero también gozar completamente de la cálida compañía de mis hijos y mi increíble esposa, a quienes no quisiera abandonar nunca, y menos antes de tiempo por no distinguir cuándo es necesario parar.
Reconozco que este país necesita liderazgos propositivos que sepan escuchar a la gente y leer el momento por el que atraviesa Colombia, por ahora la vida me imposibilita formar parte de ellos, pero no duden que seguiré trabajando por la salud desde otros espacios y siempre desde la lógica, la ciencia y la ética, que fueron y seguirán siendo mis banderas.
Finalmente, a las organizaciones que trabajan por la salud y a las y los trabajadores de la salud de este país infinitas gracias por toda su valentía y proactividad, sepan que buena parte del Congreso conoció sus demandas y reconoce su valía.
Sepan también que en mí siempre encontrarán un defensor y un aliado, así como ustedes me brindaron su apoyo y su crítica cuando fue necesario.
Sepan también que en mí siempre encontrarán un defensor y un aliado, así como ustedes me brindaron su apoyo y su crítica cuando fue necesario.
Siempre de ustedes,
Juan Luis Castro Córdoba
Médico, Psiquiatra y Salubrista Público.
Juan Luis Castro Córdoba
Médico, Psiquiatra y Salubrista Público.
Misiva del Senador Juan Luis Castro comunicando su renuncia irrevocable
