Se nos fue uno de los seres más queridos y admirados en el país. Su liderazgo, entrega y dedicación con los niños, niñas y jóvenes, nos acompañará a donde quiera que vayamos.
El profesor Abel Rodríguez Céspedes, transmitió con su sabiduría e ímpetu la importancia de educar con humanismo y calidad a generaciones, su legado seguirá inspirandonos para hacer de la educación el pilar fundamental de transformación, desarrollo y crecimiento de nuestra nación.
A su familia y seres queridos nuestro abrazo fraterno y solidario, lleno de esperanza para continuar trabajando de las manos de las maestras y maestros del país.
Hasta siempre admirado y recordado amigo.
