- La congresista risaraldense interpuso acción de tutela para frenar títulos mineros que afectan a los habitantes del departamento.
- Giraldo Botero hizo un llamado urgente para que el Gobierno Nacional ponga sus ojos sobre el municipio de Belén de Umbría y todo el territorio del Paisaje Cultural Cafetero afectado por las solicitudes de títulos mineros.
Preocupada por los problemas que acarrea la megaminería en Risaralda, a través de una acción de tutela, la Representante a la Cámara por el Partido Alianza Verde, Carolina Giraldo Botero, busca frenar los títulos mineros a gran escala del municipio de Belén de Umbría, que causan graves daños medioambientales.
Con la tutela se hace un llamado al gobierno nacional y departamental para que no sigan permitiendo la explotación indiscriminada a gran escala de los suelos del departamento.
“Es completamente inaceptable que el Gobierno Nacional quiera pasar por encima de las comunidades, vulnerando sus derechos e impulsando unos proyectos de megaminería que generarán un daño irreparable e irreversible en los ecosistemas de la región y de nuestro paisaje cafetero risaraldense”, indicó la congresista Giraldo Botero.
Según datos de la Agencia Nacional de Minería, en Risaralda a la fecha hay 98 títulos mineros vigentes y 125 en solicitud, varios de ellos de alto impacto. El municipio de Belén de Umbría, Mistrató, Apia, Guática, Quinchía son unos de los más afectados por esta problemática, que afecta incluso cascos urbanos que implicarían desplazamiento de poblaciones completas.
“La ciudadanía del departamento está pidiendo frenar este proceso. Con estos proyectos megamineros se pone en riesgo la producción agrícola y agropecuaria del municipio, que es la fuente principal de la economía, el agua, fauna y flora y sobre todo la vida y salud de sus pobladores”, agregó la representante.
Desde el año 2016 diferentes multinacionales vienen solicitando permisos para la exploración de minerales de oro y sus concentrados, por lo que es urgente proteger estos y otros municipios, en especial porque muchos hacen parte del Paisaje Cultural Cafetero (PCC), declarado por la UNESCO como patrimonio mundial.